NORMAS Y TRADICIONES

Buenas Dornienses!!!

Bueno, pues en este post tratare de explicar algunas de las normas o costumbres de Poniente, de un modo sencillo y desde luego sin entrar en mucho detalle ni siendo demasiado estricto.
La intención no es otra, que la de que todo aquel que no ha leído los libros, al menos esté familiarizado con estas prácticas y no se extrañe ante su uso o petición.

EL PAN Y LA SAL: Un anfitrión puede ofrecer a sus invitados “El pan y la Sal”, es una antiquísima norma a través de la cual el anfitrión da a entender a sus invitados que a partir de ese momento se encuentran bajo su protección y amparo.
Se dice que si algún anfitrión rompe la norma del Pan y la Sal y permite o propicia que algo “malo” le ocurra a sus invitados, los dioses se ofenderán terriblemente y tarde o temprano harán pagar al “mal anfitrión” tal ofensa.

JUICIO POR COMBATE: Ante cualquier acusación, sea de la naturaleza que sea, el inculpado puede exigir un juicio por combate según las ancestrales leyes. Este juicio sustituye a cualquier otro y se resolverá con un combate a muerte entre el acusado (o su campeón) y el campeón elegido por la parte acusadora.
Tanto el acusado, como la parte acusadora, pueden elegir un campeón (que debe presentarse voluntariamente o acceder a la petición, pero nunca puede ser forzado a hacerlo.) para que luchen en su nombre.
El resultado del combate determinara si se declara al acusado culpable o inocente.

HOMBRE Y MUJER: En Dorne, la mujer no se haya por debajo del hombre. De hecho a la hora de heredar títulos, tierras o bienes, la línea sucesoria se traza partiendo del primogénito, ya sea mujer u hombre. Así que no procede bajo ningún concepto que haya un trato discriminatorio o peyorativo hacia nadie por simple razón de sexo.

IMPOSICION DEL NOMBRE: Esta tradición varía según el lugar. Los dornienses celebran la imposición del nombre de su hijo con un pequeño ritual en mitad de la noche que se inicia cuando quien lo oficia (sea una septa o un septon) ve en las estrellas que es el momento propicio.
En ese momento se inicia el ritual, que consta de un pequeño “sermón” del religioso, para después dar paso a los padres, quienes con su hijo/a en brazos lo presentan a quienes asisten con su nombre. A partir de ese momento, los asistentes ofrendan sus regalos a los dichosos padres y pronuncian unas breves palabras de justificación y buenos deseos.

En fin, aquí lo dejo de momento. Si más adelante caigo o caemos en algún otro detalle que se nos haya pasado os lo haremos saber.
Estudiar, que ya no queda nada!!!!!